Por M. H. Lagarde
Durante la rendición de cuentas que la Secretaria de Estado acaba de realizar ante la audiencia del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes que preside Ileana Ros-Lethinen, Hillary Clinton afirmó que para “defender al pueblo cubano” Estados Unidos "está comprometido" a utilizar unos 20 millones de dólares para apoyar actividades de derechos humanos en la isla”, o lo que es lo mismo, para apoyar a la contrarrevolución en Cuba.
La jefa de la diplomacia norteamericana, sin embargo, olvidó decir algo que a La Loba Feroz y sus acólitos anticubanos les habría encantado escuchar.
Además de los 20 millones de la USAID, directivos norteamericanos han estado solicitando un total de $4 millones adicionales del presupuesto propuesto por el Departamento de Estado para el año fiscal 2012 para gastos relacionados con Cuba en Washington y La Habana.
Según acaba de hacer público el blog Along the Malecon : la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana recibiría $11,741,000 en el año fiscal 2012. Esto significa un aumento del 34.4% en relación a los $8,735,000 en el año fiscal 2011 que termina en septiembre 2011.
De acuerdo con la información revelada por el periodista Tracey Eaton, la Oficina de Asuntos cubanos del Departamento de Estado recibiría para fines similares $3,608,000 bajo el presupuesto 2012. Esto es un salto de 42.8% sobre los $2,526,000 que recibió en 2011.
Por lo que el aumento del presupuesto a $4,088,000, equivaldría a $1,082,000 para la Sección de Intereses y $3,006,000 para la Oficina de Asuntos Cubanos. En ambas oficinas la cantidad de empleados permanentes se mantendría como hasta ahora. 19 en la SINA y 8 en el Departamento de Estado.
El editor de Along the Malecón llama la atención que estos aumentos adicionales se hacen en momentos en el que el Departamento de Estado está pidiendo solamente un 1% de aumento por encima de año fiscal 2010 y realizando cortes drásticos en otras partes.
El blog citado no especifica si el aumento del presupuesto en el caso específico de la SINA son un estímulo a las funciones de Damos de Apoyo de la contrarrevolución interna en la isla a la que se dedican últimamente algunos de sus diplomáticos.
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