domingo, 20 de febrero de 2011

Acólitos de Yoani Sánchez reciben instrucciones de Hillary Clinton en la SINA

 Miembros de la sociedad anexionista 2.0 acuden puntuales a escuchar la voz del amo. En el centro de la foto: la Dama del Verde, Berta Soler, junto a su esposo el mercenario recién liberado Ángel Moya.


La Dama de Verde, Laura Pollán, con tardanza y sin pamela.

Por M. H. Lagarde

Fotos: Cambios en Cuba

El pasado miércoles los mercenarios cubanos acudieron nuevamente a escuchar, en vivo y en directo, la voz del amo. Varios de los integrantes de los grupúsculos contrarrevolucionarios cubanos se dieron cita en la casa de una funcionaria de la Oficina de Intereses de Estados Unidos en La Habana, (calle 24, esquina a 7ma, Miramar) para escuchar, vía teleconferencia, y en voz de la Secretaria de Estado, Hillary Clinton, las pautas de su accionar en estos “días históricos” para la llamada sociedad civil, o sea, para los mercenarios encargados de defender, en sus respectivos países, la libertad de los intereses del gobierno de EE.UU.
Durante su intervención -pronunciada un día después de que ofreciera un discurso en Washington sobre la libertad de internet, donde aseguró que su gobierno dedicaría otros 25 millones de dólares para burlar la censura en las redes de aquellos gobiernos que no son del agrado de Washington-, la Secretaria de Estado Hillary Clinton reiteró claramente la voluntad del gobierno de Estados Unidos de continuar utilizando la llamada “sociedad civil” como punta de lanza de la subversión.
“Continuaremos defendiéndoles a ustedes. Apoyamos ese compromiso con acción. Me complace anunciar que más que duplicaremos nuestro apoyo financiero a los esfuerzos para responder a las amenazas a la sociedad civil”.
En otra parte de su discurso la señora Clinton definió sus orientaciones como un “nuevo diálogo estratégico” que, como hasta ahora, se mantendrá vigente a través de las representaciones diplomáticas de Estados Unidos.
“Tenemos muchas ideas de lo que podríamos lograr juntos, y tenemos aquí a muchos de nuestros principales diplomáticos que trabajarán en cuestiones específicas”.
Las “cuestiones especificas” a la que se refiere la Secretaria de Estado no son otras, por supuesto, que la práctica habitual de intervenir en los asuntos internos de aquellas naciones que se resisten a doblegarse ante la hegemonía imperial.
“Ninguno de nosotros –dijo Clinton- puede predecir lo que desencadenará la clase de movimientos que hemos visto ahora e incluso en el pasado el despido de un trabajador de astilleros polaco que inspiró un movimiento democrático que cambió a Europa”.
El ejemplo puesto por la Clinton no puede ser más apropiado. Para nadie es hoy un secreto que el Sindicato Solidaridad en Polonia fue un movimiento de la llamada “sociedad civil” financiado por el gobierno de Estados Unidos.
En 1984, la National Endowment for Democracy (NED), una agencia tapadera de la CIA, entregó “asistencia directa” para crear sindicatos, publicaciones y grupos de derechos humanos en Polonia, y en 1989, esa misma organización le otorgó $2.5 millones de dólares al movimiento “Solidaridad”, liderado por Lech Walesa.
Como parte del adoctrinamiento, a los mercenarios reunidos en la casa de la funcionaria de la SINA en La Habana, se les entregó el folleto “En sus propias palabras: La Secretaria de Estado Clinton habla sobre la Sociedad Civil” que recoge tres discursos sobre el tema: uno pronunciado en Marruecos en 2009, otro en Cracovia en 2010 y un tercero ante el Consejo de las Américas en mayo de 2009.


En la imagen fragmento del documento con las orientaciones de la Secretaria de Estado, Hillary Clinton entregado por la SINA a sus empleados en La Habana.

En el discurso pronunciado el 3 de noviembre de 2009 en Marruecos Hillary Clinton hace pública la iniciativa Sociedad Civil 2.0 “que ayudará a las organizaciones de base en todo el mundo a utilizar la tecnología digital para narrar sus historias, aumentar el número de sus miembros y apoyar a las bases, así como conectarse con sus comunidades y otros en todo el mundo”.
La teleconferencia de Hillary Clinton coincide -¿casualmente?- con los delirantes llamados de la contrarrevolución cubana en el exterior, a través de Facebook, para llevar a cabo un levantamiento en Cuba al estilo de los ocurridos recientemente en varios países del Medio Oriente donde, -¿también casualmente?-, y según afirmó Hillary Clinton en Marruecos, se asignaron “5 millones en fondos para subvencionar programas piloto en Medio Oriente que impulsen las nuevas capacidades de medios y redes de las organizaciones de la sociedad civil”.
Ya es hora que la Clinton y los cuatro gatos de la sociedad mercenaria cubana 2.0, sepan que Cuba nada tiene que ver con aquellos países donde Estados Unidos encumbra y derroca títeres a su antojo.
Como dijo el presidente cubano en su discurso del 1º de agosto de 2010 ante el Parlamento:
“La Revolución puede ser generosa porque es fuerte, su fuerza radica en el apoyo mayoritario del pueblo que ha sabido resistir tantos años de agresiones y sacrificios, por eso no resulta ocioso reiterar que no habrá impunidad para los enemigos de la Patria, para quienes intenten poner en peligro nuestra independencia.
Nadie se llame a engaño. La defensa de nuestras sagradas conquistas, de nuestras calles y plazas, seguirá siendo el primer deber de los revolucionarios a quienes no podemos privar de ese derecho”.



Laura Pollán (con Pamela) y su esposo el mercenario Héctor Maseda son despedidos luego de escuchar las orientaciones de Hillary Clinton.


Dania Virgen, Dama de Apoyo y bloguera, abandona la actividad, documento en mano: ¿tarea para el hogar?


Juan Eugenio Leal García, guardaespaldas del matrimonio del Piso 14 y esposo de Lidia Marta Jiménez, la mucama de Yoani Sánchez, mientras informa a sus superiores de Voces Cubanas detalles de la reunión.

1 comentario:

  1. No se cual es la Agenda de Cuba al permitir, estas acciones, en contra de la seguridad Nacional, de La Isla. Este tipo de conspiraciones, en contra de la seguridad nacional, en cualquier pais, son cosiderados bien graves, iclusive puede llevar a los conspiradores, a largas penas de prision, y en algunos casos, hasta la pena de muerte, x traicion a la Patria.

    ResponderEliminar