sábado, 12 de noviembre de 2011

Resalta Mariela Castro avances en Cuba en política sexual

Mariela Castro Espín (D), directora del Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), sostuvo un encuentro con estudiantes de la Universidad estadounidense de Hardvard, el 11 de noviembre de 2011, en la Sociedad Cultural "José Martí", en La Habana.

Mariela Castro, directora del Centro Nacional de Educación Sexual, en encuentro sostenido hoy con estudiantes de universidades estadounidenses, destacó los cambios que responsablemente aplica Cuba en materia de educación sexual.  
En el intercambio, que tuvo como sede la Sociedad Cultural José Martí, en esta capital, la master en Sexualidad resaltó la participación del Comandante en Jefe Fidel Castro en este proceso, desde los primeros momentos.  
Añadió que el líder de la Revolución Cubana tuvo una activa colaboración en la definición de las estrategias de prevención y tratamiento de estas problemáticas.  
Opinó que los avances en temas de sexualidad son parte del proceso de perfeccionamiento que enfrentamos como país emancipado, aprendizaje que, a través de la participación popular, nos permite definir el socialismo que queremos y cómo nos gustaría que fuera la sociedad cubana.  
Afirmó que si algo ha cambiado en nuestra historia es la condición de la mujer; y reconoció que se hicieron esfuerzos por eliminar la discriminación social y racial.  
Recordó que en aquellos años de cambios radicales, en medio de permanentes agresiones y hasta de invasiones, el país  mostraba progresos como ser el único de la región donde el aborto era legal.  
También resaltó el programa nacional de planificación familiar, el plan de protección a la madre y el niño, y la ley de maternidad, para asegurarle el empleo a la mujer, como instrumentos de amparo a nivel estatal.  
La Revolución movilizó la vida de las personas en Cuba y, de hecho cambió también la sexualidad, afirmó.   
Los jóvenes visitantes transmitieron sus inquietudes, relacionadas, esencialmente, con la reacción del pueblo ante esas reformas, y la manera en que Cuba atiende los casos de mujeres víctimas de abuso doméstico.  
También mostraron interés por conocer cómo respondieron el gobierno y la familia cubana ante la aparición del SIDA, y la organización de los programas de estudio sobre temas de sexualidad en las universidades cubanas.         
Agradecieron la posibilidad de este encuentro, el que -a su juicio- valoraron  como un sano intercambio entre las sociedades cubana y estadounidense, y expresaron su esperanza de que en un futuro esta cita también pueda darse en las universidades estadounidenses.

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