"Entre los sectores (de EE.UU.) que piden un cambio, muchos opinan que este es un paso positivo de Obama, pero en realidad se podría ir más allá. El presidente Obama tiene prerrogativas para ir más allá y la sociedad norteamericana está lista para levantar el bloqueo y para levantar la prohibición que impide a los norteamericanos viajar a Cuba", según la subdirectora del Departamento de América del Norte del Ministerio de Exteriores cubano, Johana Tablada.
El pasado 14 de enero, Washington anunció una nueva flexibilización de los viajes y envíos de remesas desde Estados Unidos a Cuba que entrará en vigor a finales de mes.
En concreto se autorizarán los viajes de estadounidenses a la isla con fines académicos, culturales y religiosos y se permitirá el envío de dinero a cubanos que no sean familiares con un tope de 500 dólares por trimestre.
El Gobierno de Cuba entiende que estas últimas medidas son positivas pero de alcance "muy limitado", critica que no modifican el bloqueo y advierte que EE.UU. las usará para "fortalecer los instrumentos de subversión e injerencia en los asuntos internos" de la isla.
La funcionaria del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba citada hoy por la web Cubadebate insiste en estos argumentos, si bien admite que la flexibilización anunciada por la Casa Blanca es "un pequeño paso".
Relaciona esas últimas medidas con el esfuerzo de "amplios sectores" de la sociedad estadounidense por cambiar la política de Washington hacia Cuba, pero indica que también ha habido siempre en los EE.UU. "determinados grupos interesados en que no haya ningún paso positivo en las relaciones bilaterales" con la isla.
"Estos poderosos sectores han encontrado fórmulas para amedrentar o intimidar a quienes toman las decisiones. Muchas veces distorsionan la realidad", dice Johana Tablada. EFE
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