lunes, 16 de agosto de 2010

Yoani Sánchez: ciega, sorda... y mentirosa

› Amnistía Internacional elogia a mercenarios

Por M. H. Lagarde


He seguido con interés el diálogo telefónico entre el bloguero de Miami, Pepe Varela y la mercenaria cubana Yoani Sánchez. Ya en su tercera entrega, me parece que hay suficiente material para ir ocupándose de algunos puntos de este encuentro entre los dos blogueros “hegemónicos” de aquí y de allá, según palabras de la propia Yoani.

La tuerta

El mito de Yoani Sánchez ha sido inventado sobre la repetición de un ridículo absurdo. El de la bloguera que hace un blog desde Cuba, "el país que le niega a sus ciudadanos la conexión a internet".
¿Cómo se puede ser en Cuba un bloguero sin conexión -si aun contando con el pésimo acceso a la red que tiene la Isla, gracias al bloqueo de EE.UU.-, prácticamente es imposible serlo?
No obstante, Yoani Sánchez, la ciega desconectada, escribe por encargo hasta un libro sobre cómo usar la plataforma Word Press.
En fin, que la mercenaria Yoani es ciega para lo que le conviene.

La víctima

El fin último de la utilización de la blogosfera como arma subversiva por parte del gobierno de Estados Unidos contra aquellos países que no son de su agrado, es denunciar, con el objeto de demonizar a esas naciones, la “represión” que en ellas existe.
De ahí que la cara más visible de la blogosfera que el gobierno norteamericano ha querido inventar en Cuba, tenga como principal misión materializar en la realidad virtual una represión preescrita en los informes del Departamento de Estado. No importa que para ello tenga que documentar sus acusaciones con videos en negro, imágenes congeladas y sonidos trucados. Su celular no es sordo, pero como ella, también es ciego.
Su papel de víctima es llevado al extremo. Si un humorista como Varela, recrea en caricaturas sus ciberpayasadas, ella, la paladín de la libertad de expresión, el diálogo, la comprensión y la tolerancia, considera que es agredida.
Es curioso que la bloguera afirme que el caricaturista de Miami haya -al expresar su opinión de bloguero-, “amenazado” a su hijo, dato que los defensores de la blodeguera deberían documentar a través de una exhaustiva búsqueda en el blog de Varela.
Si alguien “amenaza” a su hijo es ella misma al convertirlo, sin necesidad alguna, en uno de los personajes de su contrarrevolucionario “diario personal”.
¿Será que esta víctima mercenaria necesita de algún escudo y no vacila en usar a su propio hijo como una suerte de rehén?

La pacifista

Como, según el guión de Washington, la mercenaria se enfrenta a una sangrienta dictadura, se presupone que ella, entonces, sea una pacifista.
Pero cómo se puede ser pacifista cuando en su “diario personal”, la blodeguera habla de vengativas noches de los cuchillos largos, oye voces de manifestaciones por su ventana, pide olas subversivas como las de Irán y presagia veranos calientes.
Cómo se puede predicar paz y abrazos cuando se utiliza la provocación para generar caos y discordia.
¿Se puede ser pacifista cuando sus “oscuras” denuncias solo sirven de coartada para prolongar la guerra económica contra todo el pueblo de Cuba?

2 comentarios:

  1. O la estupidez de Yoani Sánchez es muy grande o ella se hace la boba intencionalmente, pero claro para eso es que le pagan, si no se hace la tuerta, la ciega, la pacifista y la víctima, no cobra es así de sencillo, y ella debe de estar pensando en abrir un banco porque con el dineral que el gobierno norteamericano esta gastando en ella...

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  2. no se precisa ser ni muy inteligente, ni muy viva, ni muy nada para q el imperio te use.Ya usó a tanta gente con más o menos éxito... cariños desde Brasil. Y q viva Cuba!!!! Este blog está muyyy bueno.Graciela Natansohn (Salvador,Bahia,Brasil)

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