SAN DIEGO, 15 marzo 2009 (AFP) - El derecho Daisuke Matsuzaka volvió a ser una piedra en el zapato de Cuba, y con magistral pitcheo encaminó al equipo de Japón a una victoria de 6x0, en partido de cuartos de final del II Clásico Mundial de béisbol jugado este domingo en el estadio Petco Park de San Diego (California).
Matsuzaka repitió su hazaña de hace tres años en este mismo parque, cuando doblegó a la novena cubana en la final del primer Clásico, y ahora se llevó de nuevo el triunfo, su segundo del torneo, con faena de cinco hits y ocho ponches en seis innings de actuación. La blanqueada japonesa fue a cuatros manos, con intervención además de los relevistas Hisashi Iwakuma, Takahiro Mahara y Kyuji Fujikawa. Los pitchers nipones en total repartieron 12 ponches entre la fuerte toletería antillana. Japón ligó 12 hits y cometió dos errores al campo, mientras Cuba conectó sólo seis imparables y jugó sin pifias a la defensa. Los japoneses explotaron con tres carreras en el tercer rollo ante el abridor Aroldis Chapman, quien pese a envíos que estuvieron rondando las 100 millas por hora, no supo poner la bola en la zona incómoda de los bates nipones. La tropa asiática marcó además carreras solitarias en el cuarto y quinto capítulos, ante el relevista Ismel Jiménez, y la última raya en el noveno, cuando le ligaron a Yulexis Ulacia dos hits y un toque de sacrificio. Chapman (0-1) cargó con el revés al tolerar en dos innings y un tercio de actuación tres hits, tres carreras limpias, regalar tres boletos y dar un ponche. Japón irá el martes, por el pase a semifinales, contra el ganador del otro partido de esta jornada, entre México y Corea del Sur.Cuba, de su lado, definirá su permanencia en el certamen el lunes frente al perdedor del duelo entre mexicanos y sudcoreanos.
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