El 28 de diciembre, el diario peruano “El Comercio” publicó en sus páginas una entrevista que le hiciera el periodista Bruno Rivas a Guillermo “Coco” Fariñas, “en su casa y a puertas cerradas para evitar ser interrumpidos por la seguridad del estado”, según confiesa el autor del material periodístico.
Las declaraciones de Fariñas revelan en toda su magnitud su condición de mitómano profesional. Entre las múltiples falsedades sostenidas por el “Coco” en su conversación con Bruno Rivas expresó: (Los Castros) tienen propiedades en España, Argentina y Chile, negocios con Bacardí y en la industria del vino…”
¿Conocerá el periodista Bruno Rivas que los abogados de Bacardí participaron activamente en la confección de las leyes Torricelli y Helms Burton?
¿Conocerá el periodista peruano que la firma Bacardí ha usurpado en Estados Unidos el nombre del ron cubano Habana Club?
¿Por qué el periodista no le pregunta a los dueños de Bacardí, sobre sus negocios con los Castros?
¿Qué opinión le merece a la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos esta “sería acusación”?
¿De verdad cree el periodista que la Seguridad del Estado tenga interés de impedir que sea entrevistado el Coco Fariñas?
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