Guantánamo, 4 may (AIN) La afrenta a la soberanía de los pueblos que constituyen los enclaves militares de las grandes potencias será repudiada hoy desde Guantánamo, escenario del II Seminario de Paz por la abolición de las bases militares extranjeras.
Auspiciado por el Consejo Mundial de la Paz y el Movimiento Cubano por la Paz y la Soberanía de los Pueblos, el evento reúne en este territorio a 71 delegados representantes de 36 naciones, incluida Cuba, que por más de un siglo ha repudiado la presencia yanqui en territorio de Caimanera.
El encuentro abogará por la paz mundial y fustigará invasiones militares como las que sufre el mundo en este instante en Libia, Afganistán o Iraq, donde el destructivo tronar de las armas deja su huella de muertes y mutilaciones físicas y psíquicas.
De acuerdo con el programa de dos días, hoy miércoles los delegados sesionarán en la Plaza de la Revolución Mariana Grajales de la ciudad de Guantánamo, y allí recibirán información sobre la vida en la provincia más oriental de Cuba, donde el pueblo se labra un destino de paz y desarrollo.
La jornada del jueves tendrá como escenario el poblado de Caimanera, limítrofe con la ilegal base impuesta a perpetuidad desde 1903 por los Estados Unidos a Cuba, una aberración ilegítima por carecer de límite final.
En Guantánamo fue impuesta la estación naval mediante el apéndice introducido a la Constitución de la naciente República de Cuba, conocido como Enmienda Platt, mediante el cual Estados Unidos se abrogaba el derecho de crear bases carboneras en la Isla.
Los delegados al II Seminario de Paz por la abolición de las bases militares extranjeras intercambiarán con los pobladores de Caimanera y emitirán una declaración final de condena a esos enclaves militares y por la libertad de los Cinco Héroes antiterroristas cubanos.
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