En la foto: Yoani Sánchez captada por Time en el momento que buscaba el Canistel perdido
Por Esteban Collazo
A las cosas se las llama por su nombre, sin eufemismos. Por lo tanto, a la “bloguera” cubana Yoani Sánchez se le debe nombrar como una “Mercenaria de Internet”. Yoani se convirtió de un día para el otro en el eslabón fundamental para hacer posibles las sucias campañas políticas del gobierno estadounidense contra la Revolución Cubana.
Los enemigos de un cambio en la política del gobierno de Estados Unidos hacia Cuba ven que el tiempo se les acaba. Cada vez son más las voces en contra del bloqueo estadounidense a la isla.
En su blog ampulosamente denominado Generación Y, Yoani aguarda por “la solución biológica” y señala que en Cuba “el ruido de los cañonazos ceremoniales no permite que se escuchen los golpes con los que la nueva generación está llamando a la puerta, por la que entrará como tromba a desmontarlo todo. Arrasando -de paso- con este olor a flores secas que sentimos por todos lados”. Este es un claro llamado a la violencia, un golpe desde la palabra, una invocación que suplica acabar con los valores aprehendidos por el pueblo durante décadas.
Para Yoani, Cuba es una “isla parecida a una barco que hace aguas a punto del naufragio”. Paradójicamente, la CIA tiene esos mismos planteos llamando a intervenciones violentas en contra de Cuba.
Detrás de su fugaz y exitosa carrera están los servicios inteligencia de Estados Unidos. Basta con recordar el famoso caso de Armando Valladares, un terrorista que procedía de las fuerzas policiales del dictador Fulgencio Batista, que fuera encarcelado en Cuba por sus crímenes, que fingió parálisis en prisión y le armaron desde el exterior una obra poética que falsamente se le atribuyó.
Valladares fue excarcelado y ante el asombro en la opinión pública mundial, cuando iba a tomar el avión que lo conduciría a París, se irguió desde su silla de ruedas y desfiló corriendo hacia la escalera del avión, una acción que se podría pensar como “un milagro de la CIA”. El premio para este farsante fue que durante el gobierno de Ronald Reagan, a Valladares lo nombraron Embajador de EE.UU. y su representante ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, camino que seguramente se ha propuesto transitar la moderna ciber mercenaria que hoy ocupa las redes virtuales del entramado tecnológico.
Generación CIA
Yoani Sánchez se graduó como Filóloga y en el año 2000 comenzó a trabajar en la Editorial Gente Nueva, renunciando pronto para emigrar a Suiza a fines del 2002, de donde regresó en el verano del 2004 a pesar de que, según decía, su situación económica en aquel país era muy buena. Hasta ese momento jamás había tenido una posición contraria a la Revolución Cubana, pero al poco tiempo de regresar, participó en la fundación de una revista digital opositora a la que denominó Consenso, cuyo director era Manuel Cuesta Morua, otro opositor a la revolución. La salida de Yoani de esta revista fue atribuida a problemas con Morua, brotados por intereses de renombre, notoriedad y rivalidades económicas.
Yoani no se destacaba por sus habilidades en un terrero ajeno a su profesión, como es la informática. Pero de pronto entendió que ser “bloguera” era su misión. Luego de trabajar poco tiempo como webmaster, cronista y editora del sitio contra-revolucionario “Portal desde Cuba”, en abril de 2007 creó su blog al que llamó Generación Y.
El blog de Yoani se traduce a 18 idiomas y mensualmente puede llegar a 14 millones de visitas. A cualquier bloguero le sería realmente difícil administrar ese volumen de tráfico, si no fuera gracias al soporte de especialistas anónimos que desarrollan una tarea altamente costosa. Se ha comprobado que el servidor del blog se encuentra en Alemania, y se lo mantiene un “amigo” nombrado Josef Biechelle. El servidor está ubicado aparentemente en la empresa Cronos AG Regensburg, que es una sucursal de la alemana Strato. Y es imposible que un bloguero figure en su cartera de clientes. Además, el blog no aparece en la dirección del servidor (http//www.cronon-isp.net/index.html) y es fabricado por contratación directa. El soporte técnico que le da servicio casi exclusivo es diseñado a mano y su costo es de miles de dólares.
Por si fuera poco, y para sorpresa de muchos que la consagran como la gran periodista que da voz a los perseguidos en Cuba y denuncia las injusticias de un sistema ineficiente, el registro de dominio del blog de Yoani Sánchez se hace a través de Goodaddy, que actúa como una de las empresas contratistas del Pentágono para la “Ciberguerra”. Por lo tanto, llama la atención que Yoani pueda utilizar tecnología estadounidense pese al bochornoso bloqueo impuesto al pueblo cubano.
Es de público conocimiento que existen programas de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) en contra de Cuba. Uno de ellos, apoya económicamente a “periodistas independientes” de la isla (www.usaid.gov/locations/latin_america_caribbean/cuba/photogallery/cu01.html). No es casual que el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos haya determinado que compañías como Google y Microsoft permitan el chat en la isla a pesar del bloqueo.
Un informe del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, habla de la utilización de Internet para alcanzar el objetivo histórico de un “cambio de régimen en Cuba, desarrollando acciones a través de la Web y respaldando los objetivos estratégicos norteamericanos en materia de comunicación”. Para ello, se hace urgente manipular contenidos para conseguir mayor credibilidad ante la opinión pública internacional porque no se confía en las fuentes del gobierno de EE.UU.
El gobierno estadounidense recientemente destinó para desarrollar Internet y optimizar la banda ancha 6300 millones de dólares, y de esta forma poder interferir de manera más eficaz en la política interna de los países.
Llama la atención que el propio presidente de Estados Unidos, Barak Obama, días atrás haya contribuido dando proyección mundial a esta hija de la CIA, respondiendo en el blog de Yoani a un cuestionario que ella le había formulado. Obama, mientras visitaba China, remarcó en su respuesta “la importancia de este canal como ejemplo de ‘periodismo ciudadano’”.
Los premios
Un recurso muy utilizado por la CIA para convertir a sus instrumentos en pseudo personalidades es el de gestionarles cuanto premio internacional sea posible, con el solo objetivo de darles artificialmente el relieve del que en realidad carecen.
En mayo de 2008 a Yoani se le otorgó el premio de periodismo Ortega y Gasset en la categoría de trabajo digital. Poco tiempo después, la revista Time la puso entre las cien personas más influyentes del mundo en la categoría “Héroes y pioneros”. Su blog fue incluido entre los 25 mejores del planeta, en una selección hecha por la revista Time junto a la CNN. Luego, le dieron el premio del jurado en el concurso español Bitácoras.com.
También fue premiada en “The BOBs” y en 2008 la revista semanal del periódico El País de España la incluyó en una selección de los 100 hispanoamericanos más valiosos del año.
Pero sin dudas, el premio que más ha confortado a Yoani es el de “Héroe de la Libertad”, que le otorgó el Consejo para la Libertad de Cuba, una organización terrorista de Miami.
Quizás, para felicidad de Yoani, el noble Obama le entregue el Nobel de la Paz que le entregaron por no levantar el bloqueo a Cuba o por seguir enviando tropas estadounidenses a Afganistán.
Sigue así Yoani, la CIA te apoya.
A las cosas se las llama por su nombre, sin eufemismos. Por lo tanto, a la “bloguera” cubana Yoani Sánchez se le debe nombrar como una “Mercenaria de Internet”. Yoani se convirtió de un día para el otro en el eslabón fundamental para hacer posibles las sucias campañas políticas del gobierno estadounidense contra la Revolución Cubana.
Los enemigos de un cambio en la política del gobierno de Estados Unidos hacia Cuba ven que el tiempo se les acaba. Cada vez son más las voces en contra del bloqueo estadounidense a la isla.
En su blog ampulosamente denominado Generación Y, Yoani aguarda por “la solución biológica” y señala que en Cuba “el ruido de los cañonazos ceremoniales no permite que se escuchen los golpes con los que la nueva generación está llamando a la puerta, por la que entrará como tromba a desmontarlo todo. Arrasando -de paso- con este olor a flores secas que sentimos por todos lados”. Este es un claro llamado a la violencia, un golpe desde la palabra, una invocación que suplica acabar con los valores aprehendidos por el pueblo durante décadas.
Para Yoani, Cuba es una “isla parecida a una barco que hace aguas a punto del naufragio”. Paradójicamente, la CIA tiene esos mismos planteos llamando a intervenciones violentas en contra de Cuba.
Detrás de su fugaz y exitosa carrera están los servicios inteligencia de Estados Unidos. Basta con recordar el famoso caso de Armando Valladares, un terrorista que procedía de las fuerzas policiales del dictador Fulgencio Batista, que fuera encarcelado en Cuba por sus crímenes, que fingió parálisis en prisión y le armaron desde el exterior una obra poética que falsamente se le atribuyó.
Valladares fue excarcelado y ante el asombro en la opinión pública mundial, cuando iba a tomar el avión que lo conduciría a París, se irguió desde su silla de ruedas y desfiló corriendo hacia la escalera del avión, una acción que se podría pensar como “un milagro de la CIA”. El premio para este farsante fue que durante el gobierno de Ronald Reagan, a Valladares lo nombraron Embajador de EE.UU. y su representante ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, camino que seguramente se ha propuesto transitar la moderna ciber mercenaria que hoy ocupa las redes virtuales del entramado tecnológico.
Generación CIA
Yoani Sánchez se graduó como Filóloga y en el año 2000 comenzó a trabajar en la Editorial Gente Nueva, renunciando pronto para emigrar a Suiza a fines del 2002, de donde regresó en el verano del 2004 a pesar de que, según decía, su situación económica en aquel país era muy buena. Hasta ese momento jamás había tenido una posición contraria a la Revolución Cubana, pero al poco tiempo de regresar, participó en la fundación de una revista digital opositora a la que denominó Consenso, cuyo director era Manuel Cuesta Morua, otro opositor a la revolución. La salida de Yoani de esta revista fue atribuida a problemas con Morua, brotados por intereses de renombre, notoriedad y rivalidades económicas.
Yoani no se destacaba por sus habilidades en un terrero ajeno a su profesión, como es la informática. Pero de pronto entendió que ser “bloguera” era su misión. Luego de trabajar poco tiempo como webmaster, cronista y editora del sitio contra-revolucionario “Portal desde Cuba”, en abril de 2007 creó su blog al que llamó Generación Y.
El blog de Yoani se traduce a 18 idiomas y mensualmente puede llegar a 14 millones de visitas. A cualquier bloguero le sería realmente difícil administrar ese volumen de tráfico, si no fuera gracias al soporte de especialistas anónimos que desarrollan una tarea altamente costosa. Se ha comprobado que el servidor del blog se encuentra en Alemania, y se lo mantiene un “amigo” nombrado Josef Biechelle. El servidor está ubicado aparentemente en la empresa Cronos AG Regensburg, que es una sucursal de la alemana Strato. Y es imposible que un bloguero figure en su cartera de clientes. Además, el blog no aparece en la dirección del servidor (http//www.cronon-isp.net/index.html) y es fabricado por contratación directa. El soporte técnico que le da servicio casi exclusivo es diseñado a mano y su costo es de miles de dólares.
Por si fuera poco, y para sorpresa de muchos que la consagran como la gran periodista que da voz a los perseguidos en Cuba y denuncia las injusticias de un sistema ineficiente, el registro de dominio del blog de Yoani Sánchez se hace a través de Goodaddy, que actúa como una de las empresas contratistas del Pentágono para la “Ciberguerra”. Por lo tanto, llama la atención que Yoani pueda utilizar tecnología estadounidense pese al bochornoso bloqueo impuesto al pueblo cubano.
Es de público conocimiento que existen programas de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) en contra de Cuba. Uno de ellos, apoya económicamente a “periodistas independientes” de la isla (www.usaid.gov/locations/latin_america_caribbean/cuba/photogallery/cu01.html). No es casual que el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos haya determinado que compañías como Google y Microsoft permitan el chat en la isla a pesar del bloqueo.
Un informe del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, habla de la utilización de Internet para alcanzar el objetivo histórico de un “cambio de régimen en Cuba, desarrollando acciones a través de la Web y respaldando los objetivos estratégicos norteamericanos en materia de comunicación”. Para ello, se hace urgente manipular contenidos para conseguir mayor credibilidad ante la opinión pública internacional porque no se confía en las fuentes del gobierno de EE.UU.
El gobierno estadounidense recientemente destinó para desarrollar Internet y optimizar la banda ancha 6300 millones de dólares, y de esta forma poder interferir de manera más eficaz en la política interna de los países.
Llama la atención que el propio presidente de Estados Unidos, Barak Obama, días atrás haya contribuido dando proyección mundial a esta hija de la CIA, respondiendo en el blog de Yoani a un cuestionario que ella le había formulado. Obama, mientras visitaba China, remarcó en su respuesta “la importancia de este canal como ejemplo de ‘periodismo ciudadano’”.
Los premios
Un recurso muy utilizado por la CIA para convertir a sus instrumentos en pseudo personalidades es el de gestionarles cuanto premio internacional sea posible, con el solo objetivo de darles artificialmente el relieve del que en realidad carecen.
En mayo de 2008 a Yoani se le otorgó el premio de periodismo Ortega y Gasset en la categoría de trabajo digital. Poco tiempo después, la revista Time la puso entre las cien personas más influyentes del mundo en la categoría “Héroes y pioneros”. Su blog fue incluido entre los 25 mejores del planeta, en una selección hecha por la revista Time junto a la CNN. Luego, le dieron el premio del jurado en el concurso español Bitácoras.com.
También fue premiada en “The BOBs” y en 2008 la revista semanal del periódico El País de España la incluyó en una selección de los 100 hispanoamericanos más valiosos del año.
Pero sin dudas, el premio que más ha confortado a Yoani es el de “Héroe de la Libertad”, que le otorgó el Consejo para la Libertad de Cuba, una organización terrorista de Miami.
Quizás, para felicidad de Yoani, el noble Obama le entregue el Nobel de la Paz que le entregaron por no levantar el bloqueo a Cuba o por seguir enviando tropas estadounidenses a Afganistán.
Sigue así Yoani, la CIA te apoya.
Tomado de la revista Zoom
No hay comentarios:
Publicar un comentario