La ultraderecha no descansa

› Los aullidos de la Loba Feroz

Recientemente se realizó una reunión de representantes de la ultraderecha con congresistas estadounidenses en Washington, en una clara declaración de guerra hacia Latinoamérica, el ALBA y en particular hacia Venezuela. Las amenazas emitidas hacia el continente por parte de la principal vocera del encuentro, la congresista republicana cubano americana Ileana Ros-Lehtinen, quedaron registradas como para que nadie tenga duda.
Ros-Lehtinen planteó en el Salón de la Cámara de Representantes del Congreso de Estados Unidos, donde se realizó el encuentro de los ultraderechistas, una embestida contra el presidente de Venezuela, Hugo Chávez. "Espero que ahora que vamos a una nueva mayoría (...) hagamos eso: enfrentemos a Hugo Chávez", remarcó Ros-Lehtinen, en una declaración en la que destacó el espacio que recuperaron los republicanos en la Cámara de Representantes, tras el debilitamiento del Partido Demócrata en las pasadas elecciones del 2 de noviembre. La confesión no deja dudas de las intenciones que tienen los autoproclamados paladines de las libertades.
Ros-Lehtinen es la portavoz de ese nuevo resurgir de las oligarquías que se están reconstruyendo para desestabilizar gobiernos progresistas, para organizar magnicidios y acciones terroristas. Ros-Lehtinen "se impuso en esa cumbre de mafiosos como la jefa, como la prima donna de ese coro de gente de extrema derecha, listos para todo, cuando se trata de recuperar el espacio perdido en América Latina", alertó el diario cubano Granma.
El odio de Ros-Lehtinen al socialismo es demencial. Y tal como su colega de la Florida, Connie Mack, quién exhortó en la cumbre ultraderechista de Washington a "asesinar a Chávez", Ros-Lehtinen llamó a matar al líder histórico de la revolución cubana, Fidel Castro.
"Apruebo la posibilidad de ver a alguien asesinar a Fidel Castro", afirmó con histeria la politiquera republicana en marzo de 2006 en su oficina de Washington, en el curso de una entrevista para el documental británico 638 Ways to Kill Castro.
"Hace años que digo esto y no tengo ninguna vergüenza de mis palabras", insistió quien era entonces vicepresidenta del Comité de Relaciones Internacionales de la Cámara de Representantes.
Al encuentro, titulado "Peligro en los Andes: amenazas a la democracia, derechos humanos y la seguridad interamericana", asistieron personajes como el ex enviado especial de la Casa Blanca para América Latina, Otto Reich, el empresario venezolano acusado de corrupción y prófugo de la Justicia, Guillermo Zuloaga, entre otros.
La ofensiva ultraderechista es vasta. La organización UnoAmérica del venezolano Alejandro Peña Esclusa, detenido en Caracas por terrorismo, acaba de concluir en Bogotá la reunión anual de sus dirigentes, apenas unos días después de terminarse el encuentro de la extrema derecha continental en el Capitolio.
La actividad estratégica de esa agrupación constituida por nostálgicos de las dictaduras militares y partidarios de regímenes que se entregaron a Estados Unidos, se consagró a "un exhaustivo diagnóstico de la situación continental" según un breve comunicado emitido por los organizadores.
El encuentro se inició con la lectura de una carta de Peña Esclusa en la cual el "líder" neofascista venezolano expresa las orientaciones. Critica las normales relaciones de los presidentes Santos y Chávez y ataca al Foro de San Pablo. Las fuerzas reaccionarias no descansan.
Al influjo del triunfo republicano en las legislativas norteamericanas, los sectores reaccionarios de la región salen otra vez para intentar frenar el avance de las fuerzas progresistas en la región. Los tiempos son de cambio en nuestra América. Debemos defender a ultranza nuestra decisión inquebrantable de seguir en la senda de mayor democracia y de cambios. Debemos estar alerta para defenderlos, los nostálgicos siguen al acecho.

› Editorial de LaRepública.com.uy