WASHINGTON, 2 Dic 2009 (AFP) - El legislador republicano Jeff Flake admitió este miércoles que el proyecto de ley para levantar las restricciones de los viajes de los estadounidenses a Cuba, no cuenta aún con los votos para ser aprobado en el Congreso.
Flake, congresista por Arizona, afirmó a periodistas que la iniciativa que se estudia en la Cámara de Representantes (435 escaños) cuenta con el apoyo de alrededor de 180 legisladores, menos de los 218 que se necesitan para su aprobación.
"Estamos trabajando para alcanzar esa meta. (...) Va a ser una votación cerrada, pero seguimos trabajando", dijo Flake, uno de los principales impulsores del proyecto que pretende levantar totalmente las restricciones para viajar a Cuba.
El congresista admitió que la política punitiva contra Cuba ha estado vigente por bastante tiempo y "muchos legisladores no desean cambiar su postura o ceder".
Al proyecto se le oponen la mayoría de los republicanos y más de 50 de miembros del partido Demócrata, quienes argumentan principalmente que al permitir los viajes se incrementará el turismo, trayendo beneficios al régimen castrista.
Sus defensores afirman que la afluencia de turistas estadounidenses inundará Cuba con valores democráticos y fomentará la economía informal, que escapa al control del Estado comunista.
"No hay garantías de que esto traerá democracia" a la isla, pero ante el fracaso de la política actual debería intentarse otro enfoque, arguyó Flake.
› ¿Cuánto cuesta el "cambio de postura"?
Flake, congresista por Arizona, afirmó a periodistas que la iniciativa que se estudia en la Cámara de Representantes (435 escaños) cuenta con el apoyo de alrededor de 180 legisladores, menos de los 218 que se necesitan para su aprobación.
"Estamos trabajando para alcanzar esa meta. (...) Va a ser una votación cerrada, pero seguimos trabajando", dijo Flake, uno de los principales impulsores del proyecto que pretende levantar totalmente las restricciones para viajar a Cuba.
El congresista admitió que la política punitiva contra Cuba ha estado vigente por bastante tiempo y "muchos legisladores no desean cambiar su postura o ceder".
Al proyecto se le oponen la mayoría de los republicanos y más de 50 de miembros del partido Demócrata, quienes argumentan principalmente que al permitir los viajes se incrementará el turismo, trayendo beneficios al régimen castrista.
Sus defensores afirman que la afluencia de turistas estadounidenses inundará Cuba con valores democráticos y fomentará la economía informal, que escapa al control del Estado comunista.
"No hay garantías de que esto traerá democracia" a la isla, pero ante el fracaso de la política actual debería intentarse otro enfoque, arguyó Flake.
› ¿Cuánto cuesta el "cambio de postura"?
No hay comentarios:
Publicar un comentario