En el espectáculo, celebrado en el teatro Karl Marx, donde también se estrenó el documental Silvio Rodríguez. Ojalá, del realizador español Nico García, se rindió homenaje a los 43 años de la agrupación, considerada por Alfredo Guevara, presidente de la cita cinematográfica, como el símbolo musical de Cuba.
El llamado “Tren de la Música Cubana” interpretó temas antológicos de su repertorio más antiguo, mezclados con éxitos recientes como La maquinaria y La costurera, que levantaron de sus asientos a los cientos de espectadores presentes.
Formell, director y fundador del conjunto creado en 1969, dijo que resultó un honor celebrar el aniversario de la orquessta en un evento de tanto prestigio, y agradeció la deferencia de los organizadores, en especial Guevara, por brindarle la posibilidad de ponerse en contacto con América y el mundo en esta gala.
Durante lo que fue una aparición sorpresa para sus seguidores, Fito Páez bailó salsa y cantó fragmentos de Habana y Yo vengo a ofrecer mi corazón, al ritmo de Van Van, antes de despedirse con un “hasta mañana”, refiriéndose a su concierto de hoy en el mismo coliseo habanero.
Por su parte, Nico García agradeció el gesto de confianza al ser escogida su obra para abrir la 34 edición del evento y reconoció el apoyo del cantautor cubano Silvio Rodríguez al acceder a realizar el material, que constituye un acercamiento a la figura del artista a través de testimonios de personalidades y amigos.
Alfredo Guevara, en las palabras de apertura, señaló el éxito actual de las producciones latinoamericanas en el mundo y recalcó la importancia de la juventud para continuar y mejorar el legado fílmico de la región.
Recalcó la voluntad de llevar el Festival a todas las provincias de la Isla, especialmente a las universidades, centros de formación de un hombre, capaz de discernir y hacer el bien.
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