Los concentrados -un millar, según señalaron a Efe fuentes de la Policía- llegaron caminando hasta las inmediaciones del Congreso desde el campamento de la vecina Puerta del Sol tras una pancarta con el lema "www.tomalaplaza.net.", y desde otros barrios de la capital española.
Un fuerte dispositivo policial les ha impedido llegar hasta la puerta del Congreso de los Diputados, por lo que permanecen sentados en la calzada de la Carrera de San Jerónimo, donde se encuentra la sede parlamentaria.
Los concentrados levantan las manos mientras corean "Esta son nuestras armas", "O pasamos o acampamos", y repiten los lemas con los que han comenzado las protestas en las plazas españolas el pasado 15 de mayo: "Que no, que no, que no nos representan" y "Lo llaman democracia y no lo es".
El motivo por el que decidieron trasladar su protesta a la sede del Congreso es expresar su rechazo a la nueva normativa laboral relativa a la negociación colectiva entre empresarios y trabajadores, que completará la reforma laboral aprobada hace un año por el Gobierno.
El próximo viernes, está previsto que el Ejecutivo apruebe esa nueva legislación en la reunión semanal del Consejo de Ministros después de que la patronal y los sindicatos fracasarán en el intento de alcanzar un acuerdo para consensuarla.
Uno de los concentrados explicó con un megáfono el "empeoramiento" que asegura va a suponer la reforma de la negociación colectiva laboral.
"Este contrato para los diputados" y "Esto es un atraco, manos arriba", son algunas de las frases que corean los manifestantes congregados en las inmediaciones del Congreso.
Anoche, en una asamblea, los "indignados" que desde mediados de mayo ocupan la céntrica Puerta de Sol de Madrid en demanda de un cambio político y social, decidieron que levantarán el próximo domingo el campamento, epicentro de las protestas que han tenido lugar en España.
El campamento, que comenzó en plena campaña electoral para los comicios regionales y locales del 22 de mayo pasado y que ha tenido réplicas en numerosas ciudades españolas, se levantará con "una gran fiesta", según dijo un portavoz de los "indignados".
En los últimos días, muchos de los acampados en distintas plazas de España habían trasmitido el deseo de irse y levantar el campamento en las intervenciones que tienen en las distintas asambleas.
Entre los motivos alegados para dejar de pernoctar en la plaza se han mencionado los de un cierto cansancio o desgaste, una progresiva degradación del espacio y hasta motivos de seguridad.
Los comerciantes de la plaza madrileña han denunciado que la acampada de protesta ha causado una disminución de ventas en las tiendas de la zona, una de las más turísticas y transitadas de la capital.
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