La muestra "Cuba, mucho gusto" fue abierta la noche del miércoles en el Museo Nacional de Brasilia con una presentación de la cantante Laritza Bacallao y sus ritmos caribeños, con presencia de artistas de la isla y autoridades brasileñas.
"El cine, la música, la fotografía, son parte de una historia muy rica en Cuba de la cual yo soy parte", comentó el artista plástico Kcho, nombre artístico de Alexis Leiva, una de las estrellas de la exposición.
El eje de la muestra de Kcho es una instalación denominada "La Conversación", en la que numerosos barcos de madera de distintos son dispuestos en pie como formando grupos que conversan entre sí a lo largo y ancho de un salón.
El tema del mar es el centro de otras dos obras del artista radicado en la Isla de la Juventud: el Fénix, un barquito en cuya vela se proyectan banderas de varios países, y el David, un muelle de madera con forma humana que el artista colocó en la playa aledañ a a su casa, donde permaneció un año. En Brasilia se muestra un video en que aparecen personas caminando sobre la pieza, con niños corriendo y lanzándose al agua.
"En la cultura cubana, el mar es como la sangre. En cada momento de la historia de mi país está el mar", explicó Kcho a periodistas al abrir su muestra particular la noche del jueves.
"Cuba, mucho gusto", preparado a lo largo de un año, se mantendrá en exhibición en Brasilia hasta el 2 de diciembre, con exhibiciones diarias de algunas de las películas más representativas del cine cubano reciente, como "Fresa y Chocolate", "La bella de la Alhambra", "El premio flaco" y "Los dioses rotos".
"El cine, la música, la fotografía, son parte de una historia muy rica en Cuba de la cual yo soy parte", comentó el artista plástico Kcho, nombre artístico de Alexis Leiva, una de las estrellas de la exposición.
El eje de la muestra de Kcho es una instalación denominada "La Conversación", en la que numerosos barcos de madera de distintos son dispuestos en pie como formando grupos que conversan entre sí a lo largo y ancho de un salón.
El tema del mar es el centro de otras dos obras del artista radicado en la Isla de la Juventud: el Fénix, un barquito en cuya vela se proyectan banderas de varios países, y el David, un muelle de madera con forma humana que el artista colocó en la playa aledañ a a su casa, donde permaneció un año. En Brasilia se muestra un video en que aparecen personas caminando sobre la pieza, con niños corriendo y lanzándose al agua.
"En la cultura cubana, el mar es como la sangre. En cada momento de la historia de mi país está el mar", explicó Kcho a periodistas al abrir su muestra particular la noche del jueves.
"Cuba, mucho gusto", preparado a lo largo de un año, se mantendrá en exhibición en Brasilia hasta el 2 de diciembre, con exhibiciones diarias de algunas de las películas más representativas del cine cubano reciente, como "Fresa y Chocolate", "La bella de la Alhambra", "El premio flaco" y "Los dioses rotos".
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