La Habana, 16 ago (AIN) Miles de cartas, correos y faxes llegan a la Casa Blanca, provenientes de organizaciones y cubanos residentes en los Estados Unidos, solicitando la anulación de una propuesta contra los viajes a Cuba.
La enmienda presentada por el congresista anticubano Mario Díaz-Balart al proyecto de ley de Asignaciones de la Cámara de Representantes, es repudiada en misivas, correos electrónicos y llamadas telefónicas, según informa Prensa Latina.
Pese a que el Presidente Barack Obama y varios miembros influyentes en el Congreso han manifestado no estar de acuerdo con la enmienda, aún el asunto no ha sido solucionado.
Esta propuesta de Díaz-Balart retoma lo decretado en el gobierno de George W. Bush, que solo les permitía a los cubanos residentes en Estados Unidos visitar cada tres años a sus familiares y limitaba las remesas.
Por otro lado, aunque en enero del 2011, por resolución de Obama, se suavizaron algunas regulaciones, todavía existen prohibiciones de otorgar licencias para actividades turísticas, según una ley aprobada desde el año 2000.
Representantes de la extrema derecha cubanoamericana como Ileana Ros-Lehtinen, David Rivera y el propio Díaz-Balart, se esfuerzan por revocar el relajamiento de las restricciones de viajes a Cuba.
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