lunes, 26 de abril de 2010

Ernesto Hernández Bush-too: ¿continuará?

Por Ernesto Pérez Castillo

Después del “continuará” con que dio fin Ernesto Hernández Bush-too a la supuesta primera parte –¿de tres?– de su crónica sobre su sorpresiva visita a Bush, ha sabido guardar recatado silencio y dejar en ascuas a sus seguidores. Eso sí, mucho twitter sobre cualquier bobada, levantar polvo y más polvo que impida ver la embarrada que se gastó.
Y es lógico, tras tamaña salida del closet –con foto incluida, Bush sonriente y a su derecha Hernández Busto con cara de “qué clase de embarcada me estoy dando aquí”–, la cosa es para pensársela, y eso es una tarea que a él le queda extra-grande.
En esa primera y única parte, tantos días después del descalabro, Busto intentó una defensa que sigue la clásica estrategia del que sabe que el fango le llega a las orejas: huir, sí, pero huir hacia adelante. Ya que está al borde del abismo, Busto decide dar el paso al frente…
Dice él en apenas un párrafo: “nunca he ocultado mis simpatías políticas”, y lo dice tras enterarse de que su foto con Bush ha dado la vuelta al mundo, pese a que la gran prensa mundial no ha sacado de debajo de la alfombra ni una coma sobre el evento texano de ciber disidencia, y nadie sabe aun el por qué de ese obstinado silencio.
Bueno, para ser exacto, hubo un medio de prensa –uno solito, pero uno al fin y al cabo– que siguió tímidamente el evento, la mal llamada TV Martí, que es justo la televisora del gobierno norteamericano que no se ve.
Busto, en ese párrafo que no dice nada, intenta justificar su presencia en los feudos de Súper W. Curioso que mencione sus “simpatías políticas” sin nombrar a Bush.
Pero, para lo que Busto omite, están estas cuartillas. Que las cosas no se van a quedar así. Lo primero es lo primero: Busto reconoce sus simpatías políticas por Bush, OK, perfecto, pero… ¿y eso qué quiere decir?
Eso, ni más ni menos, significa que Busto, el “ciber disidente” que grita y patalea por la “libertad de expresión”, aprueba el Patriot Act de Bush, que violó los derechos constitucionales de los ciudadanos norteamericanos, que autorizó las escuchas indiscriminadas de cualquier conversación telefónica y que ordenó el monitoreo de todos los e-mails.
Y significa también que Busto da por bueno el uso de la mentira por parte del gobierno yanqui para justificar sus acciones criminales. Bush mintió cuando dijo al mundo que el Talibán tenía redes de apoyo en Irak, y mintió cuando dijo que Sadam Hussein tenía armas de destrucción masiva. Bush mintió para justificar su agresión a ese país y el genocidio que allí se comete día a día, y esas mentiras a Hernández Busto solo le generan simpatías.
Busto simpatiza también con la instrucción de Bush que autorizó el uso de las torturas en los interrogatorios de los sospechosos apresados por la CIA. Y le simpatiza igualmente que esos sospechosos puedan ser detenidos, sin orden judicial, no importa en qué país estén, y sean secuestrados y confinados en cárceles secretas, sin que jamás se le presenten cargos.
Por supuesto, se entiende que Busto simpatiza con la agresión ordenada por Bush contra Afganistán y contra Irak. Los cohetes cayendo a mansalva sobre Bagdad le deben de parecer la cosa más simpática de este mundo.
No hay que olvidar que el 30 de agosto de 2008, en su blog, Busto publicó uno de sus desatinos, titulado “¿Victoria?” – http://www.penultimosdias.com/2008/08/30/%C2%BFvictoria/–, donde se explayó: “Mi opinión más íntima sobre la situación cubana es que una intervención militar de EE UU sería la manera más rápida y productiva de acabar con el castrismo. Pero esa es una certeza personal, y no intento obligar a nadie a que la comparta.”
Así, el Busto belicoso, simpatizante de Bush, ha puesto ya sus cartas sobre la mesa. Ahora solo le falta alistarse en los marines y venir al frente de la invasión. Yo lo invito, y personalmente le estaré esperando. Lástima que este Capitán Araña lanza sus fanfarronadas desde tan lejos, y esté tan valientemente dispuesto a seguir la guerra... por televisión.

3 comentarios:

  1. Hay que tener la cara dura, para sentir empatías por un hombre como Bush, un hombre que no sabe ser ejemplo ni antes sus hijos; si es que los tiene. Ja,jaja, da risa como dice que se siente frustrado porque Bush no haya invadido a Cuba, es verdad que la envidia, y el deseo de tener cada vez más, sin tener nada, convierte a las personas en puras cotorras parlanchinas. Al final de la jornaad es puro bla, bla, la disputa a la alarga distancia, no corre peligro para ningíun adeversario. Es tan carroñero, que para atrás ni para coger impulso aunque se estéhundiendo en mazamorra, no coge para atrás como le cangrejo, que va, prefiere arriesgarse, que desacabellado suelen ser las personas por tener unos verdes en le bolsillo, la vergüenza le falta a los que a otros les sobra.

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  2. Es el deseo de todos los mercenarios norteamericanos, invadir y dominar a Cuba. Estos planes más de una vez han sido frustrados, o simplemente no han tenido resultado. En estos momentos, los mercenarios norteamericanos se encuentran apostando por otra vía, pero la con el mismo objetivo, esta vía es a través de la fuerte guerra mediática que llevan contra Cuba, con la cual pretenden tergiversar todo la verdad cubana, para ya tener justificación si tuvieran que invadir la isla.

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  3. Me parece coherente: el hombre apoya a Bush y defiende que todo "hubiera sido más rápido" con una intervención militar. Qué otra cosa se puede esperar de ese tipo?

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