Desde el día que Carlos Varela empezó a escribir canciones, no paró jamás. ¡Y eso que fue en 1978!
La matemática es sencilla en su caso: si su primera canción fue escrita cuando tenía apenas 15 años de edad, el lote que ahora acumula a los 46 años, es abundante.
Lo que pasa con Carlos Varela es que es intenso para componer, pero no anda en la vida con prisa. Si tiene que esperarse cinco años para grabar un álbum, aunque no pare de componer, él se espera.
Y eso pasó con No es el fin , acumuló temas este cubano autor de Como los peces, hasta que llegó a la conclusión de que la dramaturgia que buscaba estaba ahí.
Y con 12 temas editó su nuevo álbum que lo llevó por Canadá hace poco en conciertos exitosos, tanto que, a uno de ellos se dejó ir Sting.
Mañana la espera habrá valido la pena, tras mucho tiempo de no verle en suelo tico, Carlos Varela dará concierto, pero antes, desde Cuba, habló con Viva .
Hace mucho que no le vemos por Costa Rica ¿Qué ha estado haciendo todo este tiempo?
Componiendo muchas canciones, como a velocidad de conejo (Ríe). Estamos viviendo en un mundo donde hay una crisis con lo discográfico, pero yo no he dejado de componer, no he dejado de hacer giras dentro y fuera de Cuba, pero grabar lo que es grabar, no he hecho mucho porque me gusta que los discos tengan una dramaturgia, un color, un camino...
Entonces tiene un montón de canciones por ahí...
Así es, tengo demasiadas canciones ya como para hacer diez discos ahora mismo, solo que no encontraba las canciones que conformaran el disco que tenía ganas de hacer hace años, desde el punto de vista poético y musical.
Pero el espíritu que buscaba finalmente llegó.
Sí, lo encontramos a finales del año pasado y comenzamos en enero haciendo sesiones y talleres con algunos temas que incluso ya había estrenado en varios sitios en Cuba. Otros eran inéditos. Escogimos estas primeras 12 canciones que quedaron en el disco que fue editado en Canadá.
¿Hablamos de No es el fin ?
Exactamente. Ahora el disco que ya está editado es como la primera versión, porque es posible que yo haga otra con nuevas versiones y colaboraciones con músicos cubanos y estadounidenses.
¿Por qué esa canción es el norte de este nuevo disco? La letra habla de la historia de una muchacha.
Porque No es el fin es más bien un camino, las canciones están enlazadas unas con otras y hacen que el disco sea un camino de ida y vuelta. No es el fin es una canción que había escrito hace ya cuatro años y la redescubrí. Me gusta muchísimo.
¿El Carlos Varela que se formó en el teatro aparece en la canción La comedia silente?
(Se ríe) Absolutamente. Me formé como actor, pero al final esa no fue mi profesión. Una profesora me decía que lo que iba a sacar de estudiar eso era la teatralidad de mis conciertos, el cuidado de la luz, los tempos , la dramaturgia interna de cada concierto y la teatralidad dentro de cada una de las canciones a la hora de contar historias.
Eso está claro en sus discos.
Es cierto, si te fijas bien yo soy un contador de historias. De alguna manera, contando historias sobre lo que veo, lo que siento y lo que me cuentan, dentro y fuera de Cuba, voy también contando un poco lo que pienso.
Ya que nos estamos basando en el pasado un poco: hay una canción fundamental en su historia, Soy un gnomo , de 1989. Es como una confesión de sí mismo.
Absolutamente.
Entonces ¿De ese autorretrato de gnomo que queda ahora cuando hablamos de un disco como lo es No es el fin ?
Ahora me parezco más a mi caricatura, solo que con la gran bendición de seguir escribiendo poesía y música en un mundo tan difícil como el que estamos viviendo. Y que la gente venga a los conciertos, se lleve estas canciones a su casa; duerma con ellas; haga el amor con ellas, es un bendición.
“Sí, sigo siendo el mismo gnomo solo que con una visión más universal de las cosas, a los veintitantos años me bastaba con hacer fotografías de mi barrio, con los años y viajando una buena parte por este mundo, descubres que la desilusión, el amor y la rabia son iguales en Costa Rica que en Moscú o Nueva York. Lo que cambian son los escenarios, los telones de fondo, entonces empiezas a profundizar más en la esencia de las cosas.
“Haces canciones, entonces, conectadas con tu realidad, pero con un sentido universal.”
Y eso pasó con No es el fin , acumuló temas este cubano autor de Como los peces, hasta que llegó a la conclusión de que la dramaturgia que buscaba estaba ahí.
Y con 12 temas editó su nuevo álbum que lo llevó por Canadá hace poco en conciertos exitosos, tanto que, a uno de ellos se dejó ir Sting.
Mañana la espera habrá valido la pena, tras mucho tiempo de no verle en suelo tico, Carlos Varela dará concierto, pero antes, desde Cuba, habló con Viva .
Hace mucho que no le vemos por Costa Rica ¿Qué ha estado haciendo todo este tiempo?
Componiendo muchas canciones, como a velocidad de conejo (Ríe). Estamos viviendo en un mundo donde hay una crisis con lo discográfico, pero yo no he dejado de componer, no he dejado de hacer giras dentro y fuera de Cuba, pero grabar lo que es grabar, no he hecho mucho porque me gusta que los discos tengan una dramaturgia, un color, un camino...
Entonces tiene un montón de canciones por ahí...
Así es, tengo demasiadas canciones ya como para hacer diez discos ahora mismo, solo que no encontraba las canciones que conformaran el disco que tenía ganas de hacer hace años, desde el punto de vista poético y musical.
Pero el espíritu que buscaba finalmente llegó.
Sí, lo encontramos a finales del año pasado y comenzamos en enero haciendo sesiones y talleres con algunos temas que incluso ya había estrenado en varios sitios en Cuba. Otros eran inéditos. Escogimos estas primeras 12 canciones que quedaron en el disco que fue editado en Canadá.
¿Hablamos de No es el fin ?
Exactamente. Ahora el disco que ya está editado es como la primera versión, porque es posible que yo haga otra con nuevas versiones y colaboraciones con músicos cubanos y estadounidenses.
¿Por qué esa canción es el norte de este nuevo disco? La letra habla de la historia de una muchacha.
Porque No es el fin es más bien un camino, las canciones están enlazadas unas con otras y hacen que el disco sea un camino de ida y vuelta. No es el fin es una canción que había escrito hace ya cuatro años y la redescubrí. Me gusta muchísimo.
¿El Carlos Varela que se formó en el teatro aparece en la canción La comedia silente?
(Se ríe) Absolutamente. Me formé como actor, pero al final esa no fue mi profesión. Una profesora me decía que lo que iba a sacar de estudiar eso era la teatralidad de mis conciertos, el cuidado de la luz, los tempos , la dramaturgia interna de cada concierto y la teatralidad dentro de cada una de las canciones a la hora de contar historias.
Eso está claro en sus discos.
Es cierto, si te fijas bien yo soy un contador de historias. De alguna manera, contando historias sobre lo que veo, lo que siento y lo que me cuentan, dentro y fuera de Cuba, voy también contando un poco lo que pienso.
Ya que nos estamos basando en el pasado un poco: hay una canción fundamental en su historia, Soy un gnomo , de 1989. Es como una confesión de sí mismo.
Absolutamente.
Entonces ¿De ese autorretrato de gnomo que queda ahora cuando hablamos de un disco como lo es No es el fin ?
Ahora me parezco más a mi caricatura, solo que con la gran bendición de seguir escribiendo poesía y música en un mundo tan difícil como el que estamos viviendo. Y que la gente venga a los conciertos, se lleve estas canciones a su casa; duerma con ellas; haga el amor con ellas, es un bendición.
“Sí, sigo siendo el mismo gnomo solo que con una visión más universal de las cosas, a los veintitantos años me bastaba con hacer fotografías de mi barrio, con los años y viajando una buena parte por este mundo, descubres que la desilusión, el amor y la rabia son iguales en Costa Rica que en Moscú o Nueva York. Lo que cambian son los escenarios, los telones de fondo, entonces empiezas a profundizar más en la esencia de las cosas.
“Haces canciones, entonces, conectadas con tu realidad, pero con un sentido universal.”
Tomado de la nacion.com
En Hora buena Varela ,Este disco ya era esperado por muchos seguidores y realmente lo merecemos ,cada vez nos parecemos mas a nuestras caricaturas
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