lunes, 18 de mayo de 2009

Gracias por la amistad

M. H. Lagarde

Si es cierto que uno muere realmente cuando es totalmente olvidado, a Benedetti le quedan aún muchos años de vida. Una verdad indiscutible es que la sencillez y la sinceridad de obra, ya sea la narrativa o su poesía, caló en lo más profundo de toda una generación de lectores de habla hispana.
¿Quién no escucho en voz del poeta las palabras que deseaba decir? ¿Quién, con aspiraciones literarias, no garabateó alguna vez un poema tratando de imitar sus versos? ¿Quién no trató de impresionar a una muchacha con sus poemas? ¿Quién no lleva todavía dentro los valores que sembró su obra?
Benedetti, junto a Hemingway, es uno de esos escritores a quienes los isleños se han robado y cuentan como suyos. En su caso, por haber vivido varios años exiliado en La Habana, por la huella de su presencia en Casa de las Américas y por los versos que le dejó a esta ciudad de mulatas en los cuatro puntos cardinales."Cuba, dijo, ha sido siempre una palabra muy importante para mí. Incluso antes de viajar a este país, la Revolución cubana fue para muchos uruguayos una alerta, nos sacudió porque vimos la posibilidad de enfrentar de alguna manera esa presión que es política, económica, militar, cultural... de los Estados Unidos".
De algún modo, el uruguayo también se consideraba de algún modo cubano y hasta algunos de sus amigos veían con envidia el hecho que su fidelidad a la Revolución cubana rayara casi en el delirio.

Habanera

(Mario Benedetti)

Es preciso ponernos brevemente de acuerdo:
aquí el buitre es un aura tiñosa y circulante,
las olas humedecen los pies de las estatuas
y hay mulatas en todos los puntos cardinales.

Los autos van dejando tuercas en el camino,
los jóvenes son jóvenes de un modo irrefutable.
Aquí el amor transita sabroso y subversivo
y hay mulatas en todos los puntos cardinales.

Nada de eso es exceso de ron o de delirio,
quizá una borrachera de cielo y flamboyanes.
Lo cierto es que esta noche el carnaval arrolla
y hay mulatas en todos los puntos cardinales.

Es preciso ponernos brevemente de acuerdo
esta ciudad ignora y sabe lo que hace.
Cultiva el imposible y exporta los veranos
y hay mulatas en todos los puntos cardinales.

Aquí flota el orgullo como una garza invicta,
nadie se queda fuera y todo el mundo es alguien.
El sol identifica relajos y candores
y hay mulatas en todos los puntos cardinales.

Como si Marx quisiera bailar el mozambique
o fueran abolidas todas las soledades.
La noche es un sencillo complot contra la muerte
y hay mulatas en todos los puntos cardinales.

Era un amor incondicional que iba más allá de los versos y que el autor de La Tregua demostró en su continuo reclamo porque Estados Unidos cesara el bloqueo contra la isla.
Ahora, después de su muerte física, cuando algunos pretenden minimizar, con la gloria literaria, su posición de intelectual comprometido con la justicia, es bueno recordar que en el 2005, el poeta más popular de Iberoamérica, alzó su voz para reclamar a Washington la extradición del terrorista Luis Posada Carriles. "Es obvio que no se trata de un exiliado común sino de un asesino y si el gobierno de Estados Unidos decidiera darle asilo se convertiría automáticamente en un aliado de ese crimen".
De igual forma, en momentos difíciles, cuando muchos le dieron la espalda a Cuba, allí siempre estuvo Mario, con su palabra, de nuestro lado.

1 comentario:

  1. Hay mulatas en los cuatro puntos cardinales,
    para poetas de este tiempo de combate.
    Donde Mario vivirá en cada estrofa
    las razones del amor a nuestra tierra.

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