México (EFE).- El cantautor cubano Silvio Rodríguez interpretó diecinueve de sus mejores temas ante varios miles de mexicanos a quienes invitó a que se sintieran cómodos, "como en la sala de una casa".
Acompañado por el poeta Roberto Fernández Retamar y el guitarrista Rachid López, el artista de 62 años de edad comenzó con "Ala de Colibrí" y a partir de ahí entonó otras dieciocho canciones, entre ellas la inédita "El gigante", escrita el año pasado y que aparecerá en su próximo disco.
Las cerca de 10.000 personas presentes en el Auditorio Nacional se volcaron con el cantautor apenas 10 minutos después de empezar la velada al hacer los coros en "Te doy una canción" y aplaudir los poemas de Fernández Retamar.
Sin embargo, le dejaron sólo en "La gota de Rocío", una canción cuya versión más conocida es un dúo de Silvio y su hermana Anabel; cuando el cantante está en los conciertos son sus fans quienes suelen entonar la parte que le toca a su acompañante ausente, algo que está vez no sucedió.
Una falta de complicidad momentánea que se difuminó con "Te amaré", "Mujeres", Ojalá", "Playa Girón" y "Unicornio".
Silvio, que a veces introdujo cambió en la música y letra de sus canciones, reconoció que algunas de sus creaciones están inspiradas en textos de Fernández Retamar y trató de acomodar sus interpretaciones a los poemas de su compatriota.
Después de dos años de ausencia en México, Silvio se presentó con sobriedad, lució una barba canosa inusual y ataviado con un pantalón vaquero, una chaqueta color café y una boina oscura, que sólo se quitó en la última canción del concierto, "Historia de las sillas", que entonó después de que el público corease su nombre durante ocho minutos consecutivos.
" Gracias México!", dijo Silvio después de 2:25 horas de canciones en las que comprobó que este país sigue siendo una de las plazas del mundo donde más lo siguen.EFE
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