Los muertos en Venezuela, Leonardo DiCaprio y la vaquita marina

Por M. H. Lagarde

La prensa internacional ha puesto a funcionar el contador de muertos en Venezuela. Uno a uno hacen públicas las víctimas de violencia provocada en las últimas semanas por las protestas de la  oposición.

Ya se sabe que tal “conteo de protección” forma parte de la estrategia de los llamados golpes blandos según el manual de Gene Sharp. El coro mediático mantendrá al día la estadística hasta que Estados Unidos decida que la  alarma conlleva a crear una coalición internacional para invadir a Venezuela.

Hace más de una década durante el gobierno de Chávez visité dos veces Venezuela. En ambos viajes me llamó sobremanera la atención los reportes de prensa que daban el parte de las centenares de muertes que tenían lugar en ese país en las juergas del fin de semana. Eran muertos venezolanos cuyas vidas no parecía interesarle mucho a nadie.

Lo mismo ocurre ahora mismo en México. El Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS) de Londres hizo público este martes que 23.000 personas fallecieron en México solo durante el 2016  por la guerra del narcotráfico, siendo el segundo país del mundo, después de Siria, con  mayor cantidad de muertos. Y aunque la noticia fue publicada en la mayoría de los periódicos del mundo ninguna organización internacional se ha pronunciado hasta ahora sobre la espantosa matanza que tiene lugar en el país azteca.

La OEA de Almagro, por ejemplo, donde curiosamente México se encuentra entre los países que se han sumado a condenar lo que ocurre en Venezuela, no ha dicho una palabra sobre el tema. Ni los centenares de periodistas asesinados en ese país ni las víctimas de las aberraciones del capitalismo más brutal significan una violación de los llamados derechos humanos. Por lo visto de acuerdo con los monopolios mediáticos el derecho a la vida solo se viola en aquellos países donde la oposición, como en el caso de Venezuela, genera, -terrorismo mediante-, muertes para defender los intereses del gendarme imperial.

Sin embargo no todo es silencio sobre México. La prensa mundial no ha pasado por alto el llamado que el afamado actor norteamericano Leonardo DiCaprio le hiciera este jueves  al presidente Peña Nieto para que salve a la vaquita marina.

Según publica el diario español El País: "En un mensaje publicado en su cuenta de Instagram, en la que tiene 16,6 millones de seguidores, el actor ha urgido al presidente de México, Enrique Peña Nieto, a que tome medidas urgentes para salvar a este pequeño mamífero que habita en las costas del Golfo de California. La petición del intérprete y activista estadounidense llega cuando la situación se ha vuelto "dramática" y se une a la campaña del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), que ha alertado sin éxito durante años sobre la extinción inminente de esta especie".

Ante el preocupante llamado realizado por el protagonista de El Renacido la respuesta del presidente mexicano en Twitter no se hizo esperar:

"Doy la bienvenida a la preocupación de Leo DiCaprio y el WWF respecto a la vaquita marina. México ha enfocado todos sus esfuerzos en evitar la extinción de esta especie".